Tengo que decir que el formato al estilo de "The Blair Witch Project", rodado a modo con cámara en mano y recreando un falso documental, no va mucho con mis gustos, pero pese a ello la película no se me ha hecho pesada. El tema -una conspiración por parte del gobierno para ocultar la existencia de trolls- me ha parecido bastante original, los paisajes de Noruega me ha gustado, los protagonistas me han resultado simpáticos y los efectos al recrear los trolls están bien, por cierto, es imposible no recordar a los trolls de David el Gnomo. En fin, una película que hay que ver sin demasiadas pretensiones. Le doy un 6.
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