
A mí esta película no me ha transmitido la emoción que sí he sentido viendo otros documentales sobre la tragedia del 11-s, y aunque al principio de la peli parece que la cosa promete, luego decae y se vuelve sosa y aburrida. La verdad es que me ha parecido una peli de lo más suave, sin sangre, sin lágrimas, sin desfallecimientos de los dos enterrados -que están más despiertos que una rosa-, en definitiva, sin emociones fuertes, para lo que es el tema. En cuanto al reparto, no pega que el actor Nicolas Cage haga esta peli, porque pienso que para dar más credibilidad a lo que se relata deberían haber puesto a un actor desconocido. Para rematar, creo que sobran las apariciones de Jesucristo con el agua... En fin, como seguimos en navidad y sigo generosa, le doy un 4.