
Vamos con una película conmovedora e interesante, que a pesar de la dureza del tema que trata tiene un enfoque optimista y es muy agradable de ver, por cierto, me han encantado las animaciones con escenarios de cartón que acompañan a algunas explicaciones que da el protagonista. Hablando del niño, tengo que decir que me ha parecido creíble y logra transmitir y llegar al espectador, en parte gracias al hecho curioso de que se grabe con su propia cámara y vaya relatando cómo se siente mientras va cumpliendo sus sueños a la vez que va sufriendo la enfermedad. En cuanto al resto de personajes también están bien, empezando por su amigo Felix, importante en la historia y terminando por sus padres que nos transmiten lo que es tener que lidiar con la enfermedad de su hijo. En definitiva, una película que recomiendo ver. Le doy un 7.