Vamos con la última entrega de los Vengadores de Marvel que en esta ocasión recoge a toda la tropa de súper héroes para luchar contra un enemigo común. El hecho de ver a tanto súper héroe por metro cuadrado le quita monotonía y le da al espectador la opción, no sólo de disfrutar de todos ellos, sino también de ver cómo se relacionan entre sí. Quiero destacar que me ha hecho gracia la pelea que tiene Bruce con Hulk que está un poco vago y no quiere salir, así como el salero que tiene el mapache de los guardianes de la galaxia. Aunque yo, por supuesto me quedo con Ironman. También decir que la cinta cuenta con unos buenos efectos, mucho ritmo y mucha acción, batallas y destrucción, cosa a la que las pelis de Marvel ya nos tienen acostumbrados. Pero lo que más me ha gustado es la chispa de humor que desprenden los diálogos. En cambio, el final me ha decepcionado: ni me cuadra el hecho de que entre todos no puedan acabar con el malo ni me gusta que se quede abierto y haya que esperar a la segunda entrega para ver qué pasa. Le doy un 6.
No hay comentarios:
Publicar un comentario