Vamos con una película entretenida y visualmente poderosa, que si bien es cierto que empieza de manera muy atractiva y atrayente, poco a poco va perdiendo algo de fuelle. Por cierto, tengo que decir que es la primera película de Jesse Eisenberg en la que el chico me convence y el resto del reparto también están bien en sus papeles de magos a lo Robin Hood que siempre van un paso por delante del FBI. Pero al final tenemos un brusco giro de guión que pretende sorprender y lo que hace es tirar por la borda la gracia original de la peli y que no te cuadren las cosas que te han vendido en las dos horas de peli. Le doy un 6.
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