Plot: A finales de los años 60, Rodríguez, un misterioso músico, fue
descubierto en un bar de Detroit por dos productores que quedaron
fascinados por sus melodías conmovedoras y sus letras proféticas.
Vamos con un documental que cuenta la historia del cantautor Sixto Díaz
Rodríguez, más conocido como Rodríguez, que en la década de los 70 a pesar de tenerlo todo a
favor para triunfar, pasó totalmente inadvertido en su América
natal y sin embargo tuvo un gran revuelo en
Sudáfrica donde sus canciones se
convirtieron en la banda sonora de mucha gente. Decir que la cinta me ha sorprendido muy gratamente: primero, por el hecho de que se nos presenta a un cantautor envuelto en un gran halo de misterio, casi fantasmagórico, marcado por falsas leyendas sobre su muerte que alimentan más aún la curiosidad hacia él, y finalmente vemos que sigue vivo y que es un tipo sencillo y muy singular. Y segundo, porque podemos escuchar parte de sus canciones, que recuerdan mucho al estilo de Bob Dylan y son realmente buenas. En definitiva, me ha parecido muy interesante y logra su propósito de que, nada más terminar de ver el documental, tengas ganas de escuchar los discos de este cantautor. Le doy un 8.
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